domingo, 30 de marzo de 2014

Visión general de la participación de la juventud en los procesos políticos de América.


¿Qué ha pasado con la participación de la juventud en los procesos políticos de los países en América durante el Siglo XX. La llamada época de las “libertades políticas”?. Es importante señalar que el proceso de “libertad política” no es exclusivo del Siglo XX, puesto que este proceso se inicio desde el momento mismo del descubrimiento y la conquista de América. Son muchos los nombres de jóvenes que se incorporaron en las luchas en contra de los maltratos de que fueron objeto por parte de los conquistadores. Un solo nombre basta para ejemplarizar “El Cacique Enrriquillo”.

Años mas tarde, en las luchas libertadoras surgieron jóvenes lideres, osados y valientes, que empujados por un claro ideal de justicia, de paz y de libertad se convirtieron en estandartes y forjadores de esos ideales y les ha correspondido por su participación en las luchas libertadoras y los procesos de formación de sus pueblos, un lugar destacado en la historia que los hace permanentes, y los convierte en paradigmas de honor y libertad, orgullo no sólo de su nación, sino de todo el continente. Ha sido tan marcada su influencia, que en nuestro siglo de “Libertades Políticas” están aun vigentes aquellos principios por ellos enarbolados, y seguirán estando mientras exista en la mente y el corazón del hombre en un sentimiento de libertad.

Mas recientemente aun, es importante reconocer la influencia ejercida en la mente de los jóvenes, por la destacada participación de una juventud ahíta de inquietudes y repleta de ilusiones, que hizo explosión en la Revolución Cubana al mando de Fidel Castro, quien, al decir del profesor Juan Bosch “fue el volcán del Caribe que sacó de los fondos de la historia la mas completa de las revoluciones sociales”. Al momento de producirse esta Revolución, la mayoría de los países de nuestra América estaban gobernados por regimenes totalitarios, en los cuales la fuerza de la represión, propia de estos sistemas, restringía y amordazaba a toda la población, especialmente a la juventud, quien vio que los jóvenes podían y tenían derecho a participar en los procesos de cambio y que estos jóvenes eran capaces de producir las transformaciones políticas, económicas y sociales exigidas por su pueblo. De ahí su influencia en el pensamiento político de muchos otros jóvenes de su época, lo cual abrió la posibilidad de una mayor participación de la juventud en la política y, consecuentemente, la aparición de nuevos partidos políticos de diferentes ideologías.

En la parte final de este siglo, es cuando se manifiesta mas evidentemente la participación exitosa de los jóvenes en los procesos electorales de América, alcanzando la primera magistratura representantes jóvenes de la política contemporánea. En estos momentos gran porcentaje de los países de toda América, son gobernados por jóvenes líderes que oscilen entre los 40 y los 50 años de edad, lo cual no ha sido motivo para el desmejoramiento en nuestros sistemas democráticos. Más aún, estos jóvenes líderes son preparados y llevados al poder por partidos políticos mayoritarios, que han confiado en ellos.

Sus actuaciones como gobernantes no son puntos de análisis en esta oportunidad. Sin embargo, no es ocioso un cuestionamiento sobre la base de una responsabilidad en la gestión gubernamental con la participación de los miembros de su partido, fundamentada en una plataforma de acción política, económica y social. Cabe destacar desde luego, que los gobernantes sin tomar en cuenta su edad o su nivel académico, no actúan solos, y que regularmente responden a unos lineamientos establecidos en las bases del partido que los llevo al poder y la mayoría de sus acciones son el reflejo de un plan político de gobierno.

Ahora bien, nos preguntamos: el soborno, el mal manejos de los fondos públicos, la prevaricación y cualquier otro delito de corrupción ejercido por un gobernante, ¿no podrían ser considerados como un reflejo de una acción mancomunada en el ejercicio del poder? Cabe destacar que de esto existe mucho en América, pero vale la pena añadir que no solo los jóvenes cometen estos delitos.

Extraido de JUVENTUD Y POLITICA EN REPUBLICA DOMINICANA Por: David Elías Melgen

TEORIA BOSCHISTA


La teoría Boschista se sintetiza en lo que es el Partido único en nuestra América. Lo constituyen sus métodos, que es otra creación de JUAN BOSCH; métodos que le han permitido al Partido mantener su mística, su coherencia y su decisión de alcanzar el poder para desde allí transformar esta sociedad y convertirla en lo que concibieron sus fundadores, es decir, completar la obra que ellos dejaron inconclusa y que aún hoy, a pesar del sacrificio de tantos buenos dominicanos que han ofrendado sus sacrificios y sus vidas, todavía no se ha logrado.

Es un compromiso histórico que tenemos los peledeístas; continuar estudiando, analizando los fenómenos y las características económicas, políticas sociales de neutro país, y cómo inciden en ellos los acontecimientos que se originan en otros países de la región o del mundo, dada la particularidad de la sociedad subdesarrollada, dependiente y deformada que nos caracteriza. Eso es lo que justifica histórica y políticamente el haber adoptado el boschismo como teoría oficial para que sirva de herramienta principal y facilite la teoría con la que nos hemos comprometido.
El Boschismo no es solamente la teoría que estudia, analiza e interpreta la sociedad dominicana, sino también es la base política del método que nos ha permitido construir el Partido capaz de transformar esta sociedad, y la base que nos permite también crear y aplicar una táctica correcta que haga más factible el alcance de nuestro objetivo estratégico, que es la liberación nacional.
El Boschismo enriquece toda teoría que se manifieste contra el oscurantismo, el caudillismo, el dogmatismo, el populismo, el oportunismo o la improvisación, males que han mantenido nuestra sociedad atada al atraso y al abuso de políticos deshonestos que se han aprovechado de la ignorancia del pueblo.
JUAN BOSCH se ha esforzado por educarnos para superar esos males; ese es el compromiso que tenemos con el, con el partido y con el pueblo.
Santo Domingo, R. D. 1993
Extraido de la pagina principal del PLD www.pld.org.do

¿Por qué es escasa la participación de los jóvenes en los partidos políticos?



Es notoria la poca participación de los jóvenes en las agrupaciones o partidos políticos, y esto se debe a diversos factores, de los cuales vamos a exponer, los que a nuestro juicio, son más relevantes:

1.- Los líderes políticos no han llenado las expectativas.

Dentro de un segmento de la juventud, existe un criterio que tiende a considerar la concepción de un mundo perfecto, ordenado, ideal; en donde todas las cosas ocupen un lugar adecuado, entendiendo por tanto que este orden debe ser ofrecido y mantenido por los lideres políticos o los partidos políticos o los partidos políticos a los que pertenecen.

2.- Decepción por las promesas incumplidas y por la corrupción.

En la mayoría de los partidos políticos existe una tendencia hacia la demagogia, donde algunos líderes con el propósito de captar una masiva votación, hacen promesas que luego no pueden cumplir, a sabiendas de que efectivamente no pueden cumplirse. Y otros, que una vez han alcanzado el poder, asumen un comportamiento corrupto, que no se corresponde con los principios que han sido enarbolados en su campaña y que decepcionan a sus seguidores.

3.- No hay respeto a la decisión de la población.

Es muy triste advertir el fenómeno que se ha producido en los últimos años, sobre todo en países en América Latina, en donde el resultado de la voluntad popular no ha sido respetado, en donde los procesos electorales han sido violados como consecuencia de la existencia de partidos políticos que quieren alcanzar o mantener el poder, aprovechando la vulnerabilidad que ofrece un sistema democrático frágil, con debilidades en su legislación e instituciones electorales.

4.- Falta de institucionalidad.

Como consecuencia del irrespeto a la voluntad popular, se manifiesta una tendencia hacia la falta de institucionalidad o al debilitamiento de las instituciones públicas, ya que con la existencia de las mismas es como se garantiza un orden democrático. Este es un fenómeno que se ha manifestado en algunos países de América Latina, que durante las décadas de los años 50 y 60 fueron afectados por regimenes totalitarios o hegemónicos, que centralizaban el ejercicio del poder en la figura del Jefe del Estado, desdeñando la tradicional teoría tripartita de la separación de los poderes del Estado, sustentada por Montesquieu, fundamento jurídico y constitucional de la existencia del Estado.

5.- Falta de visión política debido a la falta de educación política.

Debido a la escasez de medios, métodos y programas de enseñanza política, o a la debilidad de éstos en caso de que existan, lo jóvenes reciben muy poca o ninguna educación política.

Los jóvenes demandan de los partidos políticos o de las instituciones públicas, un sistema de enseñanza-aprendizaje que los prepare para una participación integra dentro de un proceso político. No existe tradición en la enseñanza de la política, el joven aprende política cuando tiene la necesidad o siente el deseo de participar en ésta y este deseo de participación generalmente resulta de circunstancias muy especiales.
Esta falta de educación y desconocimiento de la política podría ser utilizada por políticos mal intencionados que usan a estos jóvenes como piezas de manipulación para beneficio personal.

6.- Desconfianza de la población en la juventud.

Los jóvenes que han resultado beneficiados en procesos electorales y han alcanzado el ejercicio del más alto poder, no han respondido, en muchos casos, a las expectativas y a los lineamientos políticos esperados por la población y sustentados por el partido político que representan. Estos jóvenes en un irrelevante y trasnochado ejercicio público han decepcionado a los simpatizantes y adeptos que confiaban en su figura señera, como baluarte de libertades públicas y pensamiento progresista de honestidad y forjador de orden público e institucional que le devolviera a su pueblo la confianza en un sistema democrático acorde con los nuevos tiempos.

Esta desconfianza es mayor ante la necesidad de tener que reconocer que la esperanza cifrada en los jóvenes para resolver los problemas de una sociedad, ha sido hasta cierto punto decepcionante, ya que éstos no han sido capaces de llenar las expectativas y resolver lo que los políticos tradicionales no fueron capaces de hacer. Debido a esta desconfianza, los gobiernos se mantienen temerosos, en algunos casos, de brindar a los jóvenes oportunidades de participación dentro del tren gubernamental, queriendo evitar un mal manejo en las instancias de poder.

7.- No hay canales de expresión dentro de la opinión pública

La desconfianza se manifiesta también a través de los medios de comunicación. Estos se sienten temerosos de brindar su apoyo a los jóvenes, pensando, que tales no son capaces de responder a los retos que un procedimiento político les ofrece. El joven no encuentra apoyo en los medios de comunicación y le es muy difícil proyectarse a la comunidad.

Extraido de JUVENTUD Y POLITICA EN REPUBLICA DOMINICANA Por: David Elías Melgen

sábado, 29 de marzo de 2014

División de los Partidos políticos.



La existencia de la democracia está ligada en los últimos años a la existencia de los partidos políticos, ya que a través de estas agrupaciones es como se obtiene y se consolida el poder político. Dentro de un proceso de formación política surgen esas determinadas agrupaciones que conforme a su estructura, al número de sus participantes y su forma de aparición en los procesos políticos, se podrían calificar de diferentes maneras:

1.- Partidos políticos mayoritarios.

Son los considerados con mayor poder electoral para la obtención del poder político, y establecen una polarización que les permite alcanzar con relativa facilidad dicho poder, son los partidos de las masas populares, generalmente conducidos por un líder político o una ideología de pensamiento político de gran arraigo popular. Estos son los partidos que, con sus excepciones, han detentado por mayor tiempo el poder en América.

Dentro de estos grupos se manifiesta una tendencia inclinada hacia un líder político o hacia una ideología política definida que le sirve de sustentación y apoyo.

2.- Partidos políticos minoritarios.

Siempre serán agrupaciones de menor afiliación política que los anteriores. Pero mantienen un ideal político fuerte que les permite mantenerse en el escenario político por un período de tiempo más o menos prolongado, y pueden impedir que un partido político mayoritario logre una mayoría absoluta en un certamen electoral.

Estos partidos políticos minoritarios podrían agruparse o formar coaliciones con otras agrupaciones políticas; que bien podrían ser partidos políticos mayoritarios, con la finalidad de reforzar el poder político de estos y alcanzar, tal vez, alguna cuota de ese poder político; o bien podría ser con otros partidos políticos minoritarios, que tengan las mismas metas el mismo campo de captación electoral, con el fin de alcanzar le poder o una notable participación dentro del mismo.

En un tercer caso podrían, estos partidos políticos minoritarios, aliarse a otros grupos de oposición, procurando el debilitamiento o destrucción del partido político mayoritario que ostenta el poder.
En todos estos casos es notoria la influencia de estos partidos en el fortalecimiento de la democracia, a pesar de que en muchos casos, utilizan esta coyuntura para obtener prebendas en beneficio de sus miembros.

3.- Partidos políticos emergentes.

Son los que surgen en una situación crítica de los pueblos, son llamados también “Partidos Relámpagos”, ya que pueden ganar unas elecciones en su primer torneo electoral. A veces constituyen obstáculos para que dirigentes importantes de un partido político mayoritario puedan obtener la mayoría de los votos, puesto que éstos, por un fenómeno extraordinario, concitan la mayoría de los votantes. Estos partidos, si obtienen el poder y satisfacen la exigencia de la población, podrían convertirse en partidos políticos mayoritarios.

4.- Partidos políticos únicos.

Finalmente encontramos, que existen partidos políticos obedeciendo a una determinada coyuntura política, se constituyen en una única agrupación política, en razón de que, mediante un sistema de represión totalitario, eliminan por medio de la fuerza, la posibilidad de la creación de alguna otra agrupación política de distinta ideología a la sustentada por ellos y participan solos en las contiendas electorales.

Extraido de JUVENTUD Y POLITICA EN REPUBLICA DOMINICANA Por: David Elías Melgen

La participaron de la juventud en los partidos políticos



Los hombres desde su infancia aprenden a hacer suya la afiliación política de sus padres o de sus familiares cercanos. Generalmente, los niños de tanto escuchar los planteamientos políticos hechos por los miembros de su familia, van desarrollando un vocabulario y una aptitud de tendencia política. Estos son los jóvenes que al crecer buscan la participación de grupos, asociaciones, movimientos, etc., en los cuales se generan tendencias de cambios sociales, políticos, culturales o religiosos; dependiendo del grupo al cual se integren. Allí van perfilando una aptitud de liderazgo que concita la simpatía y acercamiento de sus compañeros. Son los jóvenes que alcanzan a dirigir estos grupos, los tomados en cuenta en las asambleas o reuniones
de grupo y son los que llevan los planteamientos y las adhesiones de sus grupos a esferas de poder mas elevadas.

Esto les permite desarrollar y ampliar un liderazgo con el cual participarían en una agrupación política, cuyos ideales u objetivos vayan acorde con los suyos, o más bien a una agrupación política cuyo líder sea el líder político reconocido a través de la afiliación familiar.

No siempre ocurre que los jóvenes de tradición familiar política se interesen en los mismos ideales de sus padres o familiares, muchos de ellos asumen una actitud de indiferencia o apatía, cuando no de rechazo, cuando el comportamiento político de los mismos y, en todo caso, la politicidad vivida en su entorno familiar les hastía y se revelan como entes anti-políticos. Actitud que puede reflejar un comportamiento negativo para los propios jóvenes y la sociedad.

En un tercer caso, existen jóvenes con una aptitud natural hacia la política que no es el reflejo de su influencia familiar, sino más bien, sus inclinaciones obedecen a situaciones endógenas, como son el resultado de su participación en grupos de carácter deportivo, cultural o social; en donde desarrollan una actitud de liderazgo y un deseo de una mayor participación en actividades de mayores proyecciones de liderazgo. Se acercan entonces, a una agrupación política en donde entienden que dicha participación puede beneficiarle a él y a la sociedad a la que pertenece, ya que su fuerza y empuje les permitirán aportar aspectos positivos a esa organización.

Los modelos planteados de juventud no son, ciertamente, los más numerosos en nuestras sociedades democráticas, ya que, aún cuando exista una tendencia cada vez mayor de jóvenes que pertenecen a diferentes agrupaciones políticas, el número de los mismos no es aun suficiente y nosotros entendemos que aún hoy en día esta participación debe aumentar.

Extraido de JUVENTUD Y POLITICA EN REPUBLICA DOMINICANA Por: David Elías Melgen

viernes, 28 de marzo de 2014

Espacios reservados a la juventud en los partidos políticos



¿Es la juventud un ente social con características, personalidad y firme ideología que le permiten pertenecer a los denominados partidos políticos, tomando en consideración los elementos que deben configurar a éstos?

Tradicionalmente el joven o la juventud en sentido general, es apática a la política, en razón principalmente, según se desprende de sus expresiones, de los políticos y sus partidos no han dado respuestas coherentes a este segmento de la población.

Debemos dejar establecido que en la juventud, es cuando se empieza a tener conciencia de que se pertenece a una sociedad, de que se es parte de esta y de que se debe tomar participación en los debates que se producen. Ya en la etapa de la juventud, el hombre comienza a demandar explicaciones de las cosas que no entiende y que le interesan.

Ante la incomprensión del mundo que les rodea responden de diferentes formas, en la mayoría de los casos con una actitud de indiferencia. La minoría de los casos tiende a enfrentar el problema y participa con todas las fuerzas que les da esa juventud, en los diversos programas o proyectos que le parecen más viables para solucionar los problemas sociales. Muchos jóvenes piensan que los sistemas políticos pueden cambiar la forma del mundo en que viven y que las plataformas políticas de los partidos y sus ideologías, que muchas veces coinciden con su propio pensamientos, servirán de apoyo al gobierno que emerja de su participación en un proceso electoral.

Un partido político debe privilegiar este pensamiento de la juventud y abrir espacios que permitan una masiva participación de los mismos dentro de los procesos políticos, y establecer un marco de seguridad en donde se generen conocimientos y aptitudes, y ofrecer un futuro halagador en donde la participación de la juventud se eleve a niveles directivos.

Antes estas reflexiones nos surge el siguiente cuestionamiento ¿los partidos políticos en América, han dado suficiente oportunidad a la juventud? O, ¿la juventud se ha integrado en una participación activa dentro de los procesos políticos?, ¿a qué se debe la apatía que muestran algunos jóvenes?


Extraido de JUVENTUD Y POLITICA EN REPUBLICA DOMINICANA Por: David Elías Melgen